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La Unidad de Asistencia para Causas por Violaciones a los Derechos Humanos solicitó ante la Justicia Federal un pedido de detención de 70 represores por delitos sexuales, de los que fueron víctimas 52 mujeres que estuvieron detenidas en centros clandestinos. El pedido fue solicitado en las últimas horas por los fiscales José Nebbia y Miguel Angel Palazzani ante el juez Federal ad hoc Santiago Ulpiano Martínez.
Fuentes judiciales señalaron que durante el pedido los fiscales expresaron que «la práctica no sólo satisfizo deseos genitales sino que se trató del ejercicio de poder sobre el cuerpo de las víctimas. «Hubo una doble calificación negativa sobre las mujeres; por militante y por mujer», agregaron en la requisitoria.
Según se expresó los fiscales requirieron la detención y la convocatoria a prestar declaración indagatoria de 70 ex miembros de las fuerzas armadas y de seguridad por delitos sexuales cometidos contra 52 mujeres que estuvieron cautivas durante la última dictadura, en el marco de la causa en la que se investigan crímenes de lesa humanidad en el ámbito del V Cuerpo de Ejército.
«Sostenemos un concepto amplio de violencia sexual que no se reduce a las violaciones o abusos, sino que el hecho de ser mujer en un Centro Clandestino de Detención y Tortura implicó ser víctima de violencia sexual, por la exposición a la desnudez, los insultos, el ir al baño con un hombre mirando, la higiene personal, lo que implicaba menstruar ahí», precisaron Palazzani y Nebbia en su presentación.
La presentación de los fiscales, de casi 100 carillas, recopila las pruebas obtenidas en la instrucción de las causas judiciales y en los debates orales desarrollados en la ciudad, uno de los cuales culmina durante esta jornada.
En ese sentido, Nebbia y Palazzani insistieron en que la cantidad de testimonios recabados demuestran la práctica sistemática de aquellos delitos y que, por lo tanto, no es necesario producir más elementos probatorios, salvo en los casos de víctimas que quieran y puedan declarar una vez más al respecto.
En el marco de la presentación, los funcionarios judiciales indicaron que los delitos sexuales «perpetrados entonces todavía no han sido tratados en los procesos judiciales al menos en nuestra jurisdicción de un modo acorde con la verdadera dimensión que han tenido».
Los fiscales diferenciaron en su presentación los delitos sexuales de los tormentos aplicados en los centros clandestinos de detención y luego realizaron un pormenorizado recorrido por la jurisprudencia y doctrina internacional.
En el marco de la requisitoria además indicaron que «la violencia sexual durante el terrorismo de Estado fue violencia de género hacia las mujeres». «Lejos de ser casos aislados, la violencia con connotación sexual fue generalizada y formó parte del plan general de aniquilamiento y degradación de la subjetividad de las personas” sostuvieron y agregaron que: “Fue otro de los métodos de dominación y destrucción masiva de personas».