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La delegación Viedma de la Policía Federal será señalizada mañana como centro de detención ilegal durante la dictadura cívico-militar, en un acto organizado por la secretaría de Derechos Humanos de la Nación y su par de la provincia de Río Negro.
La actividad, anunciada para las 10 en la sede del organismo de seguridad, Garrone 129, se realizará en el marco de las celebraciones por los 30 años de la recuperación de la democracia y por la sentencia del segundo juicio oral por los crímenes de lesa humanidad cometidos en el quinto cuerpo de Ejército, con asiento en Bahía Blanca.
Está prevista la presencia de funcionarios nacionales, provinciales y municipales, sobrevivientes, familiares de detenidos-desaparecidos, ex presos políticos, organismos de derechos humanos y agrupaciones políticas y sociales.
El titular de la secretaría de Derechos Humanos de Río Negro, Néstor Busso, aseguró a Télam que «esta dependencia de la Policía Federal fue utilizada como centro de detención ilegal en el marco del plan sistemático de terror y exterminio durante la última dictadura cívico-militar».
«Los operativos de detención y secuestro estaban a cargo de un grupo de tareas perteneciente a la Policía Federal, que también llevaba adelante acciones de inteligencia, interrogatorios bajo tormento y simulacros de fusilamiento» añadió.
Relató también que «tras su paso por esta delegación, los detenidos eran trasladados al centro clandestino de detención y exterminio La Escuelita de Bahía Blanca y, con posterioridad, recluidos por años en las unidades penales de Villa Floresta, en Bahía Blanca, y en de Rawson, entre otras».
«La represión ilegal en la región fue ejecutada por fuerzas conjuntas del Ejército, la Policía Federal y la policía rionegrina, bajo el control operacional del Comando V Cuerpo de Ejército, con sede en Bahía Blanca» agregó.
El funcionario recordó, finalmente, que «en septiembre de 2012, el Tribunal Oral Federal bahiense condenó a prisión perpetua, y en un caso a 18 años de reclusión, a cuatro policías federales responsables de los crímenes vinculados con esta delegación, entre ellos su ex jefe, el ex comisario Vicente Forchetti, en la causa conocida como La Escuelita I».
La señalización de los sitios de memoria, prevista en la ley nacional 26.691, hace visible la función que cumplieron esos lugares durante el terrorismo estatal, y expresa en el espacio público el compromiso del Estado democrático de dar a conocer y condenar estos crímenes, impulsar el juzgamiento de sus responsables y hacer efectivo el reconocimiento a las víctimas y sus familiares.
Con la marcación de mañana, en Viedma, serán 73 las señalizaciones instaladas en distintos puntos de todo el país.