El obispo de San Isidro, monseñor Oscar Ojea, realizará este fin de semana un pedido de perdón público a víctimas de abuso sexual por parte de un ex párroco de Tigre, el sacerdote José Mercau, que se encuentra detenido por esos hechos.
«Asumir, pedir perdón y deseo de reparar» es el título del texto que será leído el próximo domingo en las misas que se celebren en todos los templos de la diócesis, y que incluye el deseo de indemnizar económicamente a los damnificados.
Los denunciantes, que vivían en el Hogar San Juan Diego de El Talar, donde trabajaba Mercau, tenían entre 11 y 14 años en 2005, cuando estalló el escándalo. Mercau terminó procesado y detenido poco después por los delitos de «corrupción de menores reiterada, en concurso real con abuso sexual mediante acceso carnal agravado».
“La comunidad diocesana de San Isidro, y de un modo especial el obispo y su presbiterio, piden públicamente perdón a los jóvenes que han sido afectados por estas conductas realizadas por un sacerdote de nuestra diócesis, el padre José Mercau, cuando era párroco de San Juan Bautista en Ricardo Rojas», comienza el texto de Ojea.
Asimismo, expresan su «decisión de ayudar, desde nuestras posibilidades, a éstos jóvenes a sanar heridas y construir un porvenir» y expresan su deseo de que este gesto «signifique también una renovación en toda la comunidad del compromiso por promover una cultura del cuidado de los niños y adolescentes».
En la carta que se leerá este fin de semana, la Iglesia Católica de San Isidro cita palabras del papa Francisco, quien viene insistiendo desde que llegó al Vaticano con la necesidad de acompañar a las víctimas de los abusos sexuales por parte de miembros de la Iglesia.