Leonardo Grosso, diputado nacional y referente de la Campaña Nacional contra la Violencia Institucional, habló sobre las vinculaciones de efectivos de la Comisaría Octava de Monte Chingolo, partido de Lanús, en la muerte de David Olivera y Luciano Aboyo.
Los dos menores de 15 años murieron el pasado 17 de noviembre durante una dudosa persecución policial que comenzó en esa localidad y terminó en Wilde, cuando David y Luciano se estrellaron contra una camioneta.
“Que hayan sido perseguidos como delincuentes por efectivos policiales, cristaliza el miedo que le tienen nuestros pibes a la Bonaerense y la estigmatización que hacen las fuerzas de seguridad de los pibes pobres”, explicó.
Grosso agregó que existen patrones comunes en el proceder de los uniformados: “Este no es un caso aislado, hay un sector social que es objeto de hostigamiento, detenciones ilegales y arbitrariedades por parte por parte de las fuerzas de seguridad”.
En este marco, el legislador del Frente para la Victoria reclamó una reforma profunda de la Policía Bonaerense, que contemple “la democratización de la fuerza”.
“Esperamos arrancar otra etapa que se respete los intereses de la mayoría de los pibes de los barrios para construir una seguridad democrática y popular”, agregó.
Los familiares de los jóvenes, junto a organizaciones sociales y políticas, como Proyecto Nacional, marcharon ayer hacia la Comisaría Octava en reclamo de justicia.
Grosso confirmó que tras el pedido de los manifestantes, fueron removidas las autoridades de la seccional.
