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En una reciente indagatoria, el ex policía Santiagueño Juan Bustamante, apodado “Sérpico”, aseguró que Sánchez “fue el jefe de la represión en Santiago del Estero y un suboficial de apellido Álvarez, de Villa Allende, que era el nexo con Menéndez en Córdoba”.
”Sánchez no sólo manejaba todo lo relacionado con torturas, asesinatos y desapariciones, sino también cometía defraudación. Figuraba como parte del Operativo Independencia y en realidad se desempeñaba en Santiago, pero cobraba viáticos como parte del operativo que se realizaba en Tucumán”, añadió Bustamante.
Por su parte, Musa Azar, que cumple tres condenas a prisión perpetua, calificó a Sánchez como “el militar que transmitía las órdenes de Bussi y permanentemente se movía entre las provincias de Tucumán y Santiago del Estero, además de participar en las reuniones de comunidades Informativas”.
En las mismas audiencias, abogados defensores de los represores, cuestionaron la lista de acusados por interpretar que “no están todos los que deberían estar en el banquillo de acusados” al referirse a varios ex militares durante la última dictadura militar, entre ellos Sánchez.