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“Giustozzi se reunió con nosotros en abril y se comprometió a seguir trabajando para esclarecer el caso, pero no hizo nada y nunca más nos volvió a recibir”, afirmó Silvia González, la madre de Milagros, la chica que estuvo mantenida en cautiverio durante 10 días por los proxenetas de la zona. En diálogo con esta agencia, subrayó: “El intendente dice que es el primer caso de trata de personas en la localidad, pero nosotros estamos denunciando 30 desaparecidas”.
El mandato massista sigue sumando críticas entre sus ciudadanos: “La gestión de Giustozzi es un desastre”, subrayó Silvia González, quien además infirió: “Hay cocinas de cocaína a 10 cuadras de la intendencia, y todos sabemos donde va a parar esa plata”.
Los familiares de Milagros Ailén González, junto a organizaciones sociales y políticas de la zona, realizaron una movilización hasta la Municipalidad de Almirante Brown para entregar un pedido de audiencia con el intendente, exigiendo la restitución de la víctima a su hogar, la inmediata asistencia pertinente, y el esclarecimiento del caso.
La niña, de 14 años de edad con retraso madurativo, fue secuestrada el 16 de marzo en Burzaco y estuvo mantenida en cautiverio por 10 días donde fue drogada, violada y sometida a “subastas” entre los proxenetas de la zona. En esta búsqueda desesperada, su familia enfrento la inacción de la comisaría segunda de Almirante Brown a cargo del comisario Gabriel Aguirre, así como del conjunto del aparato estatal y judicial.
“Cuando la encontré, estaba deshidratada y había comido sólo dos veces”, apuntó la madre. La pequeña hoy se encuentra separada de su familia e internada en un neuropsiquiátrico. “Giustozzi se comprometió a darnos la ayuda necesaria para asistir a Milagros y a enviar un equipo interdisciplinario que la atienda”, desarrolló Silvia González, “Pero eso no sucedió y mi hija terminó con un intento de suicidio”.
La institución donde Milagros se encuentra internada es mixta y para adultos. La madre, quien considera que no está recibiendo el tratamiento adecuado, quiso sacarla, pero el juez de Garantías Gabriel Vitale lo impidió y le inició una causa por “ser nociva para la recuperación de su hija”. Al respecto, Silvia González manifestó: “La tienen atada con chaleco de fuerza, medicada y con pañales, y no está mejorando”.
Actualmente, la causa está parada y no hay nadie preso. “Están involucrados la policía, la justicia y los políticos”, acusó la madre de la víctima. Asimismo, la familia sufre a diario las amenazas de los proxenetas de la zona, por lo que se encuentran bajo custodia.