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Por Lucía Pires / Dos militantes que estaban repartiendo volantes del FpV en el Barrio Textil de Los Polvorines fueron interceptados ayer por la tarde por una patota de cuatro personas, quienes atacaron a los jóvenes con “golpes de puño, patadas y un fierro”, según expresó a esta agencia el abogado y primer candidato a concejal por el oficialismo, Rodolfo Tailhade, quien asistió a las víctimas en la denuncia.
“Un auto negro freno de golpe en el medio de la calle”, desarrolló, “Los agresores se bajaron y empezaron a insultar a los compañeros diciendo que estaban en su territorio”. Los militantes tuvieron que refugiarse en un local que se encontraba cerca hasta que la policía intervino. La fuerza pública los trasladó al hospital para el reconocimiento médico y después se dirigieron a la comisaría, donde realizaron la denuncia correspondiente.
“Estas patotas responden a Cariglino”, sostuvo Tailhade, quien también agregó que las agresiones “son recurrentes” en el distrito “desde hace muchos años”. “Es muy difícil desarrollar actividades políticas en el territorio de la violencia y la persecución”, aseveró. Además, subrayó que el incidente “fue el primero de la campaña, pero no el último”.
Asimismo, el candidato a concejal calificó la gestión del intendente massista como “paupérrima”. “El distrito muestra los peores indicadores de infraestructura de todo el conurbano”, especificó, “La falta de redes cloacales, de agua y gas son características de su mandato”.
En la misma línea, destacó “la lógica personalista y arbitraria” con la que se desenvuelve Cariglino. “No permite que la comunidad malvinense pueda recoger los beneficios de las políticas públicas”, afirmó, “Su enfrentamiento con el Gobierno Nacional no tiene razones políticas ni ideológicas, simplemente busca desempeñarse como un patrón de estancia en el distrito”.
Sobre las elecciones, el candidato a concejal declaró: “El panorama es muy favorable, acá la gente apoya a la Presidenta”. Al respecto, explicó que existe un “reconocimiento muy grande a las propuestas inclusivas” del Gobierno Nacional.
El sistema de salud es uno de los principales desaciertos del intendente. “Es su principal caballito de batalla, porque hay hospitales municipales de alta complejidad”, analizó Tailhade, “Pero son una fachada, porque tienen al personal precarizado y faltan médicos”.
La situación en Malvinas Argentinas es delicada: en los centros de atención se privilegia la atención exclusiva de clientes de prepagas, por lo que los integrantes de la comunidad que no pertenecen al sector privado de la salud tienen que esperar meses para ser atendidos. “El sistema está diseñado con un exclusivo fin recaudatorio”, puntualizó el mismo.
En la localidad se presentaron más de 250 denuncias penales por mala praxis y otras 100 por violencia política. El intendente también fue acusado de ser el jefe de una “asociación ilícita” que no sólo estaría involucrada en ataques y amenazas a opositores, sino que además habría perpetrado los saqueos a supermercados en diciembre último.
Sobre Cariglino también pesan las sospechas por la muerte del enfermero Walter Navarro, asesinado a balazos luego de denunciar las irregularidades sanitarias en el hospital municipal “Claudio Zin”. Pero ninguna de las denuncias en contra del intendente o de la comuna encuentra curso favorable en la Justicia local.
