En declaraciones a la Radio Nacional, destacó la madurez de ambos países en el tema, expresada en el compromiso de acatar y ejecutar la sentencia que en forma inapelable definirá la frontera marítima común y zanjará el litigio.
«Las aguas están tranquilas. Ha habido bastante ponderación en el caso del Perú y de Chile», expresado en reuniones y consensos en la materia de cada presidente con dirigentes de los partidos políticos de sus países.
Añadió que en Chile hay un consenso político similar al de Perú, en el sentido de que la relación bilateral -de alta importancia económica sobre todo para inversionistas chilenos aquí- «se mantenga en el tiempo, de forma razonable».
Jiménez destacó que en los últimos meses las cancillerías, los ministerios de Defensa y los medios de comunicación de ambos países, entre otros sectores, han trabajado mucho para fortalecer la relación bilateral.
Recordó también que los gremios de empresas periodísticas de los dos países han acordado tratar el fallo de La Haya con ponderación, considerando que los medios de comunicación tienen una responsabilidad histórica en el tema, por lo que no deben alentar «posiciones extremistas».
«Pero, sobre todo, tenemos que ser muy responsables y respetar el fallo de la Corte, todos los sectores políticos, sociales, la prensa, todos los que tengan algún nivel de opinión. Esto es importante porque Chile será nuestro vecino eternamente y debemos mantener las mejores relaciones», agregó.
En el litigio, Perú demanda que la Corte establezca como frontera una línea equidistante de ambas costas en vista que no existe un tratado específico que haya definido el límite.
Chile reclama como frontera la línea del paralelo, que le es ampliamente favorable y está mencionada en dos convenios de hace seis décadas que Perú considera solo como pesqueros, sin que reúnan las características que definen a un tratado de límites.
