Bajo la consigna “Democracia o Corporación Judicial”, la asociación Justicia Legítima se concentró hoy en la Plaza Lavalle, frente al Palacio de Tribunales, con el apoyo de una gran cantidad de organizaciones de Derechos Humanos, la Fundación María de los Ángeles y familiares de víctimas de la violencia institucional, entre otras.
María Laura Garrigós de Rébori, titular de la entidad, consideró que «es una pena que la Corte no nos haya acompañado» en la democratización de la Justicia.
«Queremos más apertura, más transparencia y más democracia», destacó la magistrada tras rechazar el fallo que declaró inconstitucional la elección por voto popular de los miembros del Consejo de la Magistratura.
Por su parte, el fiscal Jorge Auat señaló que quienes se oponen a la democratización y sostienen una posición corporativa “no se van a adueñar de la voluntad popular”.
“Pretendemos un Poder Judicial de cara a la sociedad, con transparencia. La opacidad es la otra cara con la que se opera y maneja, no existe el prójimo para un sistema corporativo y encerrado”, subrayó.
En tanto, Mila Montaldo, dirigente de los trabajadores judiciales, explicó que «en solo seis meses el movimiento de Justicia Legitima ha logrado instalar fuertemente el debate sobre la democratización, tanto adentro como afuera del Poder Judicial».
Montaldo criticó asimismo al titular del gremio de los empleados judiciales, Julio Piumato, opositor a la reforma, al considerar que «se puso al servicio de la corporación judicial», y afirmó que «no hay democratización de la justicia sin democratización sindical».
Taty Almeyda, referente de la Línea Fundadora de las Madres de Plaza de Mayo también manifestó su opinión, cuando un periodista le preguntó si estaba sorprendida por la decisión de la Corte Suprema.
“Honestamente me sorprendió. Tenía esperanzas de poder democratizar la justicia”, dijo Almeyda, pero pidió a quienes luchan por la democratización que “no bajen los brazos y piensen: si las madres lo lograron, ¿por qué no nosotros? Todos juntos vamos a seguir y lo vamos a lograr”.
En el acto también estuvieron presentes Pablo Ferreyra, hermano del militante político asesinado Mariano Ferreyra; Sergio Burstein, integrante de la agrupación 18J que nuclea a familiares de las víctimas del atentado a la AMIA; entre otros.