Cien mesas se instalaron en la Ciudad de Buenos Aires, las que fueron atendidas por voluntarios que brindaron datos y detalles del acuerdo celebrado entre el Gobierno Nacional y las cadenas de supermercados para que los 500 productos de la canasta establecidos no sufran alteraciones injustificadas de precios.
Otras doscientas mesas se pusieron en distintos puntos de la Provincia de Buenos Aires. En el caso de la Capital Federal participaron diferentes legisladores que se dieron cita pasado el mediodía en la esquina de Boedo e Independencia, en tanto en la provincia, los referentes zonales se congregaron en la esquina de la avenida Vergara y Jauretche, en Hurlingham. Las mesas se instalaron en los alrededores de los distintos supermercados.
El diputado Juan Carlos Junio destacó que «la iniciativa busca que la ciudadanía tenga una participación activa en los precios y vemos que ha sido recibida en forma muy positiva. El objetivo último es que los precios no terminen licuando las subas de los sueldos con aumentos injustificados».
Otro diputado, Edgardo Forn, aseveró que «queremos contribuir a la participación ciudadana para defender el bolsillo de la gente porque ninguna norma puede ser cumplida sin esa participación de la sociedad».
Y agregó que «si bien el público de la ciudad tiene una composición social, cultural y económica diferente de lo que podemos encontrar en la provincia, es bueno concientizar y hacerles entender de qué se trata el cambio cultural donde lo importante es lo colectivo, y también demostrarles que los verdaderos formadores de precios no son ni el gobierno, ni la Presidenta, sino las grandes cadenas y los grupos concentrados oligopólicos».
Yanina Chiafitella, explicó, mientras repartía folletos informativos sobre la campaña, que “las personas tienen un poder que es el de compra y la posibilidad de hacer algo por lo colectivo con el control personal que cada uno hace cuando va al supermercado”.
“Estamos explicándole a la gente de qué se trata su derecho porque creemos que en definitiva se trata de una pelea informativa y que el cuidar el bolsillo también permite cuidar al otro, el bolsillo del otro, y entre todos podemos -en este caso- hacer algo para que los aumentos de sueldos no se licuen por precios desleales”, agregó.
“También es una forma de llegada directa con el ciudadano, en tanto nosotros somos también ciudadanos de un mismo país donde queremos que todo vaya mejor y podemos compartir nuestros valores”, dijo.
El folleto que repartieron consistió en una serie de dibujos con los que se explica la relación directa entre la suba de precios y la generación de trabajo, además de la importancia del consumo para la actividad económica.
Bajo el slogan “Cuidemos el crecimiento y el bolsillo” el instructivo también tiene la lista de precios acordada por las autoridades e invita a la sociedad en participar de forma activa al control.
Marta Alvarez, una de las personas que se acercó a la convocatoria para informarse sobre la actividad, dijo que “es bueno sentir que uno como consumidora no está sola, que hay gente organizada defendiendo estos derechos tan simples que a uno le pasan por alto todos los días, y lo que me gustó de la charla que tuve con el joven que me dio el material fue que sentí que era comprendida en mi reclamo”.
Aylén Iglesias, otra joven militante, manifestó que “es importante este contacto con la gente por más que no pensemos igual políticamente. No se trata de eso, estamos defendiendo el bolsillo y en eso todos somos y pensamos igual”.
“Todos estamos en la misma, vamos al super y tenemos que sobrevivir por eso les informamos sobre listados de ofertas, lugares específicos en los barrios con precios bajos, y los invitamos a visitar la página “El precio en su sitio” que da datos concretos sobre cómo manejarse a la hora de comprar”.
Fernanda Isaurralde, otra persona interesada en la campaña expresó: “Me acabo de enterar que por ejemplo los precios congelados solo lo están en los súper. Yo había visto por tele que hacían encuestas en quioscos o almacenes de barrio y pensaba que no se respetaban los precios pero ahora me informan bien, que el acuerdo es con supermercados y por eso entiendo cómo fui engañada por los medios”.
Néstor Ventaja, acotó: “Eso es también lo que queremos hacer. Informar para que aquellos que solo se informan por medios que tal vez cambian la realidad, puedan tener un acceso directo a lo que realmente sucede. Ella buscaba los productos donde no tenía que buscarlos, ahora sabe dónde funciona el acuerdo y tienen más herramientas para decidir si compra algo o no, y a dónde”.