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El proyecto de exteriorización de capitales comienza hoy su paso por la Cámara de Diputados de la Nación luego de haber obtenido media sanción en la Cámara Alta. Los legisladores realizarán a las 14 un plenario de las comisiones de Presupuesto y Hacienda, Finanzas, y de Economía y Desarrollo Regional, con el objetivo de obtener un dictamen a tratar mañana en el recinto. El Frente para la Victoria tiene el objetivo de convertir el texto en ley con rapidez para que el régimen pueda entrar en vigencia a tiempo para abrir el período de tres meses para entrar al plan.
El titular del bloque oficialista, Agustín Rossi, se mostró seguro y sostuvo que hoy habrá un despacho de comisión que habilite el tratamiento en la sesión especial que pidió el FPV. «La idea es que el miércoles el proyecto se convierta en ley y que el 1 de junio entre en vigencia», afirmó Rossi.
Miguel Bazze, diputado radical que responde al alfonsinismo, adelantó ayer el rechazo que impulsará el grueso de la oposición. Según el legislador, su bancada asistirá al plenario de comisiones que se realizará hoy en Diputados, pero rechazará de pleno el texto del proyecto. «La ley en lugar de mejorar en algo la situación económica, inevitablemente la va a terminar empeorando porque agrava la falta de confianza, condición indispensable para lograr más inversión», dijo Bazze. Además, dijo que la iniciativa «blanquea» la incapacidad del gobierno «en el manejo y la planificación de la economía».
La ley propone la creación de tres instrumentos financieros para captar dólares no declarados y redirigirlos a sectores de la economía nacional que necesita una inyección de fondos. En el caso del CEDIN, se creará un medio de pago en dólares para reactivar el deprimido sector inmobiliario. Se podrá cambiar por el billete, siempre y cuando el poseedor muestre que el papel fue parte de una operación.
En tanto, el BAADE y su versión pagaré tendrán una tasa del 4 por ciento anual y llevarán dólares al sector energético y a la concreción de obras de infraestructura.
