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Los jueces Carlos Rozanski, Pablo Vega y Pablo Jantus comenzarán a juzgar a los ex policías Bruno Trevisán y Jorge Rómulo Ferranti, por los delitos de secuestro coactivo y tormentos, en perjuicio de los hermanos Alejandro, Carlos y Rodolfo Iaccarino.
Los hechos habrían ocurrido en 1977 en el centro clandestino de detención conocido como “El Infierno” de la localidad de Avellaneda.
Al momento en que habrían ocurrido los hechos, Trevisán y Ferranti se desempeñaban como jefe y subjefe, respectivamente, de la Brigada de Investigaciones de la localidad de Lanús.
Este juicio se enmarca también en los procesos por delitos económicos cometidos durante la dictadura, ya que a la familia Iaccarino que eran empresarios lecheros les fueron apropiados sus bienes.
En noviembre de 1976, los hermanos Iaccarino fueron secuestrados por grupos de tareas en Santiago del Estero, trasladados a La Plata donde fueron torturados en distintos centros clandestinos que integraban el Circuito Camps, estando cautivos durante 22 meses.
Antes fueron obligados a vender propiedades y acciones y a cambio les prometieron 28 hectáreas de una cancha de golf de un hotel en Córdoba que nunca les entregaron.