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Tras las declaraciones del ministro de Justicia y Seguridad bonaerense, Ricardo Casal, y el diputado sciolista Guido Lorenzino sobre la muerte del rugbier Juan Pedro Tuculet, el joven baleado durante un confuso episodio en La Plata, y el asesinato de la adolescente Karen Campos, víctima de un robo a mano armada en Junín, esta agencia dialogó con el defensor penal juveni, Julián Axat al respecto.
Axat consideró que “las estrategias del ministerio de Seguridad y Justicia son en función de los casos que van apareciendo. Hacen demagogia política con los casos para seguir hablando de su proyecto de ley de Excarcelaciones para los portadores de armas que la Corte les suspendió”.
Los funcionarios que apuntaron directamente a presionar una sentencia favorable de la Suprema Corte bonaerense sobre la polémica ley de excarcelaciones sostuvieron que “nosotros teníamos un remedio judicial para este tipo de casos, y cuando uno ve la muerte de un pibe de 19 años, de una chica de 17 años, no hace más que alarmarse, preocuparse, porque este tipo de organismos en vez de preocuparse por la seguridad de los inocentes, de los buenos, de los que trabajan, no dejan de apañar a los delincuentes», afirmó el diputado sciolista Guido Lorenzino.
Algo similar planteó Casal agregando algunas cifras para darle mayor sustento a su discurso punitivo: “Hace dos años decimos que cualquiera tiene un arma y no pasa nada. En estos días se detuvo a 95 personas armadas y 86 fueron liberadas inmediatamente. Es inadmisible que una persona con un arma en la cintura pueda transitar libremente”.
En ese sentido, Axat remarcó que “esta utilización es demagógica. Cada caso es un mundo y tiene su complejidad. El ministro de Justicia no puede tomar un caso como el de Tuculet, que por las hipótesis que se manejan hasta el momento no se trataría de un robo”.
Y aseguró que “lo van a seguir utilizando, porque están presionando a la Corte para que modifique su criterio. A la demagogia punitiva no le importa las argumentaciones jurídicas. Buscan lograr efectos sin fundamentos como hacerle creer a la gente que porque no sale esta ley, esos casos ocurren, lo cual es mentira porque la relación causal que debería explicarse entre la ausencia de esa supuesta ley y los hechos que están ocurriendo obedecen a otro tipo de reglas y otros motivos”.
“Siendo uno un ministro y hacerle creer a la gente que la culpa la tienen la Corte porque suspende este tipo de leyes, es una reducción, un uso político y moral de los casos”, señaló Axat, quien agregó que “más que hacer demagogia punitiva, hay que hablar seriamente sobre los fundamentos de la leyes que se envían a la Legislatura”.
Por otra parte, el Defensor Penal y Juvenil, evaluó que “más allá de esta manipulación que se ha hecho, la Corte Suprema no va a dar vuelta su resolución, porque está muy bien fundamentada y porque la ley de excarcelaciones viola derechos y garantías reconocidos por las constituciones de la Nación y la Provincial, así como diversos tratados internacionales de rango constitucional”.
