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«Esta salida intempestiva de Macri es un anticipo de que va a aumentar la tarifa. Quizás en un primer momento no llegue a 6 pesos pero quizás es una forma de ir amoldando a la sociedad de que puede aumentar la tarifa», sostuvo Juan Cabandié en declaraciones formuladas hoy a radio La Red.
Allí, presidente del bloque de legisladores porteños del FpV, opinó que pensar en un aumento de esta magnitud en la tarifa -cuyo valor es hoy de 2,50 pesos- «es irracional» y destacó que, primero, la gestión porteña debe realizar «una auditoría que analice costos, gastos operativos e inversión necesaria», entre otros aspectos, tal como lo definió la ley de traspaso votada en diciembre por la Legislatura.
«Nosotros no creemos que tenga que ser aumentada la tarifa. Por el contrario, las tarifas tienen que ser subsidiadas para que estén al alcance de todos. Si cuando la tarifa fue elevada a 2,5 pesos dejaron de usar el subte unos 300 mil usuarios por día, ¿qué va a pasar si la tarifa aumenta?», sostuvo Cabandié.
Además, en la entrevista, el legislador del Frente para la Victoria sugirió que existen «muchas formas» posibles para reducir los gastos operativos del subte e incrementar así los fondos para su financiamiento.
En este sentido, mencionó dos propuestas planteadas por los metrodelegados al gobierno porteño: la reducción de la cantidad de cargos jerárquicos y la reasignación de tareas que hoy se encuentran tercerizadas a los empleados del subte.
«El subte tiene la capacidad de hacer esas tareas y se pueden reducir también por ahí costos en la operatoria», sostuvo Cabandié, quien consideró «apresurado» que el jefe de gobierno porteño saliera hablar rápidamente de una «tarifa real» de al menos 6 pesos.
En otro orden, Cabandié se sumó a las críticas a la decisión de la gestión porteña de cerrar la línea A durante unos 60 días para encarar la renovación de las formaciones: «La verdad que no es necesario hacerlo; el cambio de vagones se puede hacer en dos o tres días», indicó.
«Lo primero que nos encontramos es que, para hacer un cambio de 45 vagones que compró el gobierno nacional, Macri necesita cerrar 60 días la línea A, cuando se podrían aprovechar los feriados», sostuvo Cabandié.
Por otro lado, el legislador del Frente para la Victoria entendió que «el gobierno de la ciudad encontró en los metrodelegados un grupo de trabajadores dispuestos a colaborar y mejorar la calidad de los subterráneos» y consideró que se trata de «trabajadores fanáticos del subte que quieren que funcione bien y a la vez defender sus condiciones laborales».
