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Por Agustín Espada / Faltando una fecha para la finalización de la primera rueda del torneo de Nacional B –este año se jugaron 18 partidos- los balances suelen ser muy diferentes a los que realizan los equipos que militan en la Primera División del fútbol argentino.
Debido a la complejidad y a la longitud del torneo, los análisis son un poco más cautelosos que los que se producen en la elite de nuestro país. Quedando 20 partidos por disputarse en el 2013, la carrera por conseguir el ascenso a la máxima categoría se encuentra en un punto tan cambiante como clave.
Es en este receso de verano en donde los equipos que se encuentran liderando no deben relajarse de cara al segundo semestre como muchas veces sucede –es conocido el caso de Instituto de Córdoba en la temporada 2011/12 cuando terminó un primer semestre de lujo y luego finalizó en el último puesto de promoción para ascender con jugadores y cuerpo técnico bajo amenaza-.
De la misma forma, enero es un mes importante para los equipos que se encuentran a la expectativa y esperan una chance para sumarse al pelotón de arriba, dispuestos a dar una sorpresa cuando el torneo se acerque a su final –Quilmes, por ejemplo, logró el ascenso el año pasado con un fabuloso sprint final de triunfos que coronó su retorno a la máxima categoría.
Este 2012 arroja un claro ganador y candidato firme a conseguir el ascenso: Olimpo de Bahía Blanca. Uno de los clubes más importantes de la divisional lidera la tabla de posiciones y ha conseguido algo muy necesario para la divisional como es la regularidad y que casi ningún otro equipo encontró.
El caso contrario es el de Rosario Central. El conjunto dirigido por Miguel Ángel Russo tuvo una primera mitad de campeonato para el olvido. Cuando el entrenador, referente de la institución “Canalla”, estaba muy discutido y mantenerse en el cargo se volvía complicado logró 6 triunfos en los últimos 7 partidos disputados y logró alcanzar la segunda posición de ascenso al finalizar el año.
Hay dos equipos que nadie tenía en cuenta a la hora de los candidatos a principio de torneo y el arranque del 2013 los encuentra en plena lucha por conseguir el ascenso. Uno de ellos es otro histórico de la categoría como Gimnasia y Esgrima de Jujuy, quien se encuentra tercero en la tabla de posiciones y ha mantenido un rendimiento regular a lo largo del torneo.
El otro es la sorpresa del Nacional B, la cenicienta. Sarmiento de Junín, proveniente de la tercera categoría y con un plantel con mayoría de jugadores que militaron en esa división, se encuentra a cuatro puntos del Lobo jujeño y mantiene las esperanzas de dar el zarpazo en el segundo semestre de la temporada.
En suspenso se encuentran dos equipos grandes y de los candidatos a volver a Primera División: Gimnasia de La Plata y Banfield, ambo con el mismo puntaje -30 puntos a 5 del líder-. El primero tuvo un último tramo de campeonato muy malo que lo hizo salir de las posiciones de ascenso y generó una crisis en su entrenador quien tuvo un enfrentamiento con Nicolás Cabrera, referente del equipo, que culminó con el jugador marginado.
El equipo del Sur bonaerense, por caso, mira de manera más esperanzadora el 2013 ya que lo que se suponía que sería un año de transición está dándole la posibilidad de, con un plantel de jerarquía, pelear por el rápido retorno a la A.
Por el lado de las decepciones de la primera ronda se puede ubicar a Huracán de Parque de los Patricios y a Independiente Rivadavia de Mendoza. El primero contrató jugadores de primera categoría como Hugo Barrientos y Matías Defederico pero tras un cambio de entrenador el equipo no pudo alejarse de los puestos de descenso y rápidamente se olvidó de la pelea grande.
El caso de los mendocinos es un caso típico de esta categoría, un arranque a todo vapor y una caída estrepitosa a mediados del torneo. Cuando parecía afirmarse en los puestos de ascenso, la “Lepra” mendocina no pudo hacer pie y el miedo escénico lo hundió en la tabla. Hoy, ambos equipos, afrontan un 2013 con una sola preocupación: mantener la categoría
Con 20 fechas por disputarse todo resta por decirse en el Torneo Nacional B, aunque algunos conjuntos parecen haber gastado sus primeras balas, mientras que otros recién se encuentran buscando el blanco.