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Por Germán Celesia / Los asuntos de carácter institucional referidos al gobierno bonaerense muchas veces son interpretados, por parte de los medios dominantes, como “mensajes políticos” de Daniel Scioli en contra el gobierno nacional o en favor de sus aspiraciones presidenciales. El cierre de año con beneficiarios de políticas sociales, realizado por el gobernador en el Estadio Ciudad de La Plata, es el caso más obvio. Pero en igual sentido, la decisión de intimar al gobierno porteño a que cumpla con el programa de reducción de residuos enviados a rellenos sanitarios del Gran Buenos Aires, por ejemplo, también fue leída bajo la presunción de que implicaba adelantar un contrapunto político con Mauricio Macri, el aspirante de la oposición que hoy aparece con más consenso mediático.
¿No podría leerse también en clave política la decisión de sostener judicialmente una quita salarial a los docentes que precisamente realizaron un paro de actividades para pedir, entre otras cosas, una mejora de sus ingresos? Ayer, una instancia de apelación permitió al gobierno provincial, que había incumplido un fallo de primera instancia, mantener el descuento salarial a los docentes adhirieron a los paros de actividades de octubre y noviembre. Las versiones digitales de los diarios y agencias difundieron la decisión pero la medida, que en lo sustancial significa convalidar la decisión política de reducir transitoriamente el salario de empleados dependientes del Estado provincial, prácticamente pasó desapercibida en las ediciones impresas los medios nacionales.
La página web de Clarín daba al fallo una cobertura favorable a la posición del gobernador. “La Justicia convalidó los descuentos salariales a los docentes que pararon”, titulaba. “La Cámara de Apelación en lo Contencioso Administrativo platense hizo lugar a un recurso presentado por el Gobierno de Scioli tras una resolución de primera instancia que le ordenó abstenerse de aplicar quitas a los maestros por los paros de octubre y noviembre”, agregaba como información. Y no decía una palabra de la extensión del perjuicio salarial que sufrieron docentes que sí concurrieron a sus lugares de trabajo. No obstante este enfoque, el diario optó por no incluir el tema en su “edición impresa” de hoy.
“La Justicia autorizó a Scioli a hacer descuentos a docentes por paros”, decía por su parte La Nación ayer por la tarde. Y agregaba: “Permitió la aplicación de quitas salariales que van de 600 a 1.200 pesos por maestro”, mientras advertía sobre el no cumplimiento de la meta de tener 180 días de clases por año fijada por el Ministerio de Educación del gobierno nacional. En cambio, en la edición impresa el tema está disimulado en una columna destinada a noticias breves bajo un título engañoso: “Autorizan a descontar días de paro docente”. El recorte, como bien señalaba el matutino de las familias Mitre-Saguier, ya fue realizado, e incluso abarcó a un universo mayor al anunciado.
Con mayor precisión que sus diarios colegas, aunque sin por ello poner de manifiesto una opinión crítica hacia el gobernador, el diario El Día titula: “Por ahora no devolverán las quitas a los docentes “. Y agrega, sin mencionar al gobernador en el asunto: “Lo dispuso la Justicia hasta que se resuelva la cuestión de fondo”. Acompaña a la nota central un pequeño recuadro titulado: “Todavía se adeudan haberes”, que se refiere a los descuentos indebidos.
Muy brevemente: “Autorizan descuentos salariales a docentes”, dice por su parte el diario Hoy. En tanto, en los portales nuevamente se advierte un enfoque dispar: “Autorizan descuentos a docentes por paros”, dice La Tecla. Y agrega, erróneamente: “El gobierno de la provincia de Buenos Aires podrá descontarle los días a los docentes que hicieron paro en octubre y noviembre”, cuando ya lo hizo. En cambio, en Infocielo se informa con corrección: “La Justicia avaló descuentos de Scioli a docentes”. Ninguno consideró, sin embargo, que el gobernador haya tomado la decisión política de realizar el recorte salarial como manera de posicionarse políticamente con una decisión – la de descontar salarios a los docentes huelguistas – que como mínimo puede ser leída desde el punto de vista político-ideológico. Quizás fue porque podría inducir a un juicio negativo de la “opinión pública” sobre el mandatario provincial