Los trece imputados en el juicio por la desaparición de Marita Verón sabrán el 27 de noviembre si son condenados o absueltos, ya que el tribunal anunció que ese día se conocerá el veredicto.
A partir de ahí las audiencias se suspenderán por una semana y se reanudarán el martes 20, para que los imputados puedan hacer uso del derecho de sus últimas palabras antes de conocer el fallo.
Esta etapa se extenderá hasta el 27 de noviembre y ese día, en horas de la tarde, se conocerá el veredicto, según el comunicado oficial firmado por Luli Gollan, directora de prensa y ceremonial de la Corte Suprema de Justicia de Tucumán.
El juicio continuó hoy con el alegato del abogado Sergio Pérez, quien también pidió la absolución de su defendida, Azucena Márquez, señalada por algunas testigos como una de las encargadas de los locales riojanos donde supuestamente estuvo Marita.
Según Pérez, «aquí se investigó mal porque directamente se fueron a La Rioja y se desechó todo el resto».
«Busqué en los más de 50 cuerpos de esta causa y no encontré una prueba objetiva que involucre a las trece personas que están aquí sentadas» en el banco de los acusados, afirmó.
El letrado definió a su defendida como «una persona humilde, que tuvo su primer hijo a los 15 años y a los 19 años se trasladó a La Rioja, donde conoció a Irma Medina y empezó a trabajar como empleada doméstica».
Pérez pidió la absolución de Márquez, a quien varias testigos señalaron como «doña Claudia», dueña del prostíbulo «El Desafío», argumentando la falta de pruebas para vincularla con el secuestro de Marita.
Por su parte, el abogado Juan Carlos López Casacci respondió en representación de Márquez, Medina, Mariana Bustos y José «Chenga» Gómez, la demanda civil entablada por Susana Trimarco.
«Todas las testigos que declararon en esta causa estaban por voluntad propia en las whisquerías de La Rioja ejerciendo la prostitución», indicó López Casacci.
Según el letrado, las testigos que declararon que Medina y «Chenga» Gómez regenteaban prostíbulos, «fueron traídas de la mano» por la Fundación María de los Ángeles, creada por Trimarco para ayudar a víctimas de trata de personas.