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Ante ese panorama llamaron a trabajar por el regreso de la economía mundial al camino de un crecimiento fuerte, sostenible y equilibrado.
También alertaron sobre la necesidad de más medidas efectivas para restaurar la confianza en los mercados, especialmente en la Eurozona, donde deben continuar las reformas y controlar los presupuestos sin debilitar el crecimiento.
En concreto, debe ponerse en marcha la unión bancaria y fiscal en toda Europa, recomendaron en el documento.
Al término del encuentro se subrayó que Estados Unidos tiene que evitar el abismo fiscal, o sea el aumento de impuestos y recorte presupuestario que entra en vigor automáticamente en 2013, mientras que Japón debe controlar sus problemas de déficit.
A pesar de que varios representantes de los países más avanzados expresaron su convencimiento de que la economía mundial crece, el FMI redujo del 3,5 al 3,3 por ciento el incremento previsto para este año.
También confirmó la permanencia de un clima de incertidumbre en cuanto al desempeño económico y el mercado laboral, aunque no dejó de exigirle a naciones endeudas de la zona más recortes y austeridad para recibir ayuda financiera, en los casos de Grecia y España.
Durante casi una semana el FMI encabezó debates cruzados liderados una parte por Alemania entre los que abogan por más austeridad para salir de la crisis de la deuda, y de la otra los que consideran necesario aflojar esas medidas para no asfixiar a las economías europeas.
Al respecto, la directora gerente del FMI, Christine Lagarde, señaló que se necesitan ajustes presupuestarios creíbles a medio plazo en todas las economías avanzadas, pero consideró que el ritmo y el tipo de medidas deben evidentemente calibrarse país por país.Doce provincias adhieren a la trazabilidad farmacéutica.
