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Se esperó poco más de una hora para tomar la determinación, pero nada, todo estaba perdido; la tribuna y los televidentes se quedaron con las ganas. Muy poco serio por parte de los organizadores. Hasta el momento no hay fecha para que se dispute el encuentro.
La fiesta que debía comenzar a las 22 en el Estadio Bicentenario de Chaco no pudo llevarse a cabo. El encuentro que definiría quien se alzaba con la Copa Doctor Nicolás Leóz, en su segunda edición, no pudo iniciarse ni mucho menos finalizarse. Luego de la entonación de los himnos nacionales de Brasil y Argentina, la terna arbitral demoró el comienzo del duelo por la falta de luz en el campo de juego.
Tres de las torres de iluminación ubicadas sobre una de las plateas no funcionaron de la manera adecuada y el chileno Enrique Osses dio la orden de esperar por el regreso de la luz artificial. Durante cuarenta minutos los futbolistas aguardaron sobre el verde césped. Los brasileños, a un costado del circulo central se prestaron a realizar un “Loco” para mantenerse en calor, mientras los argentinos hablaban entre si y averiguaban la situación.
Desde los organizadores llegó el aviso al cuarto árbitro, Néstor Pitana, para que este se lo transmita a Osses, deberían aguardar en los vestuarios. Ya con veintiséis minutos más de espera, el Vicepresidente de Boca Juniors Juan Carlos Crespi, dio el anunció oficial, la suspensión del clásico.
Ahora la Selección Argentina absoluta – con Leonel Messi y compañía- debe afrontar una cita doble por las Eliminatorias Brasil 2014. El viernes 12 de octubre en Mendoza ante Uruguay y el martes 16 del mismo mes en Chile ante los trasandinos. El segundo duelo del Superclásico de las Américas aun no tiene fecha para que se lleve a cabo y la nueva organización será tratada en los próximos días.