Tres de los policías acusados por el crimen de Domínguez podrían recibir prisión perpetua

Por Carlos López | El juicio oral por el crimen de Christian Domínguez en la Comisaría Primera de Berisso, ocurrido el 5 de febrero de 2005, finalizará en los próximos días cuando los jueces den a conocer su veredicto. Son acusados los ex policías Luciano Príncipi, Germán Cernuschi y Víctor Gómez, y el ex ayudante de guardia Leandro Antonelli. El abogado de la familia Domínguez, Marcelo Ponce Núñez, dijo a AgePeBA que posiblemente el viernes, o a más tardar el lunes, se presente la resolución final del caso. “Hoy alegó la fiscalía y nosotros también lo hicimos, por lo que ahora falta el alegato de la defensa, que será mañana al mediodía, y las réplicas para pasar a la sentencia”, explicó. Ponce Núñez y la fiscal Rosalía Sánchez esperan que el tribunal condene a Cernuschi, Gómez y Príncipi a prisión perpetua y que le dé una pena de cinco años a Antonelli. Teniendo en cuenta las pruebas presentadas durante el desarrollo del proceso, el pedido puede concretarse, según estimó el letrado, sobre todo después de que se ampliara la acusación por el delito de “privación ilegal de la libertad” contra Cernuschi y Príncipi. El tribunal conformado por los jueces Ernesto Domenech, Florencia Butiérrez y Liliana Torrisi pudo reconstruir el crimen luego de sucesivas inspecciones oculares en la comisaría de Berisso. También recogió los testimonios de ex presos que se encontraban en los calabozos cercanos al de Christian, quienes afirmaron haber escuchado gritos, golpes y comentarios de los policías sobre la muerte de un recluso. A su vez, los expertos de la Asesoría Pericial, Andrea Nons y Miguel García Olivera, y el perito de parte de la familia, Miguel Ángel Maldonado, confirmaron que el joven de 30 años sufrió una “muerte en custodia por acción de terceros”. Esto contrasta directamente con la versión oficial de la Bonaernese, que sostiene que Domínguez se ahorcó. Las pericias evidenciaron el intento de ocultar el asesinato por parte de las fuerzas policiales, ya que se constató que las marcas en el cuello de Christian fueron realizadas luego de su muerte. De esta forma, Príncipi, Cernuschi y Gómez podrían ser condenados por los delitos de privación ilegal de la libertad y torturas seguidas de muerte, mientras que Antonelli por adulterar el libro de guardia de la seccional el día en que murió Domínguez.